Más del 47% de las mujeres sufren estreñimiento inmediatamente después del parto.
El estreñimiento después del parto se produce debido a varios factores fisiológicos y psicológicos que impiden el normal funcionamiento del tránsito intestinal. Según un estudio publicado por investigadores de la UEF (Universidad del Este de Finlandia) en el International Journal of Gynecology & Obstetrics la incidencia de estreñimiento después del parto vaginal aumenta al 47 por ciento, y hasta el 57 por ciento de las mujeres que tuvieron un parto por cesárea informaron de problemas gastrointestinales y estreñimiento.
Factores que provocan el estreñimiento postparto
- Los músculos abdominales que ayudan a la eliminación se han visto distendidos durante el parto, quedando flácidos y transitoriamente ineficaces.
- Es posible que, además, el propio intestino se haya visto traumatizado por el parto y haya quedado perezoso.
- También influye en el estreñimiento el hecho de que el embarazo y el parto incrementan la presión en la región anal y esto incrementa la posibilidad de que aparezcan o se intensifiquen las hemorroides. El dolor que provocan durante el postparto puede hacer que, involuntariamente, retengamos debido al miedo a ir al baño.
- Y es que probablemente los inhibidores más potentes de la actividad intestinal después del parto son de carácter psicológico: el miedo al dolor, la poca intimidad en el hospital, el temor a que se abran los puntos si nos han practicado una episiotomía, o la propia presión sobre la madre para que evacue («hasta que no vayas al baño no sales del hospital» y lindezas de ese tipo)…
- Alrededor del 50% de las mujeres embarazadas sufre estreñimiento en algún momento durante el embarazo. Esa propensión hace probable que en algún momento del postparto también haya dificultades para evacuar a un ritmo normal.
- Además, se debe tener en cuenta que durante la primera evacuación tras el parto también puede demorarse debido a que, por lo general, el intestino está vacío en el momento del parto si le realizaron una lavativa o lavado con enema a la madre, o si se evacuó durante la fase expulsiva.
- El sedentarismo habitual en los primeros días tras el parto no favorece el tránsito intestinal, así que, aunque nos cueste un gran esfuerzo, se recomienda iniciar los paseos cuanto antes. Un cuerpo inactivo favorece un intestino inactivo.
Consejos para aliviar el estreñimiento postparto
- Actividad física. Hay que intentar levantarse de la cama cuanto antes, pasear con el bebé, mover las piernas.
- Una alimentación variada y rica en fibra. En general hablamos de cereales integrales, verduras, hortalizas, frutas (ciruelas, kiwis, albaricoques…) y legumbres.
- Y por supuesto, una buena hidratación es fundamental: beber muchos líquidos. Además de ayudar a ablandar las heces en caso de estreñimiento, compensaremos la pérdida de líquidos tras el parto.
La regularidad del sistema no se consigue sin esfuerzo, pero tampoco se puede prolongar indefinidamente. Así que, si ninguna de las medidas anteriores ha funcionado, hemos de pedir ayuda médica para solventar el estreñimiento. Los especialistas nos aconsejarán, y si lo consideran necesario podrían recomendarnos ablandadores de heces o laxantes naturales, aunque si estamos dando pecho se nos advertirá que el efecto laxante en algunos casos se podría excretar y pasar al bebé a través de la leche.
No nos hemos de preocupar si la primera evacuación se retrasa, pues esa preocupación podría agravar el problema. El estreñimiento postparto es una situación normal y que siempre acaba desapareciendo, tarde o temprano. No hemos de preocuparnos tampoco si, una vez logradas las primeras deposiciones, volvemos a sufrir estreñimiento en algún otro momento durante las primeras semanas tras el parto.
Finalmente, las primeras evacuaciones resultarán dolorosas, aunque poco a poco, a medida que las heces se ablanden y recuperemos la función intestinal regular las molestias irán despareciendo y el estreñimiento postparto quedará en el recuerdo.